Raquel Miralles Mateu, cinco generaciones de comerciantes de barrio en Pego

Raquel Miralles Mateu, es la propietaria de la tienda Casa Mateu Miralles, una de las muchas tiendas de barrio de toda la vida de Pego. Pero no es una tienda cualquier, es un comercio que atesora la historia de la evolución de esta localidad, no en vano, es la quinta generación de comerciantes del municipio.

La última tienda de esta saga tomó forma tras una profunda renovación el pasado año, en plena estado de alarma. El primer día que se pudo abrir los comercios Raquel Miralles y su marido Carlos decidieron abrir el local donde se encuentran ahora. Una tienda física, pero que su propietaria ha volcado en internet, con una tienda online y sobretodo con una página de facebook en la que ella misma y su familia son los modelos de la ropa que puede encontrar cualquier cliente en su negocio. Es la publicidad del siglo XXI.

“Por parte de padre soy la cuarta generación de comerciantes, y por parte de madre la quinta”, explicó ayer a Deniadigital. Recuerdos de esos comercios aún se pueden ver en Pego. En el Carrer de la Mar, la bisabuela de Raquel, Carmen vendía de todo 'Viuda de Fernando Mateu' se puede ver aún en la fachada del edificio. “Mi bisabuela vendía de todo”, Fideos, arroz, bisutería, toallas, bragas.. hasta medicamentos e incluso el café que tostaba “mi bisabuelo en la terraza de la casa”.

También enfrente de la actual tienda hay otro vestigio del pasado comercial de la familia, 'Confecciones Mateu'. Entrar en su interior es volver a las tiendas de antaño. Raquel conserva este espacio como almacén, pero sus paredes atesoran la historia comercial de Pego. Dos mesas de madera, donde su familia atendía a los clientes. El suelo hidraúlico, y estanterías donde estaban expuestos las telas y tejidos.

Otros de los muebles de esta tienda han sido restaurados por Raquel y su marido y se han incorporado al equipamiento del nuevo local, están perfectamente integrados.

Miralles reconoce que lleva el servicio al cliente en la sangre “cuando de joven otros se iban a los recreativos yo estaba en la tienda”, aseguró ayer. “Inconscientemente o no consiguió meterse en mi y desde entonces no he parado”. No para ni en casa, ya que atiende pedidos por wasap. “Me mandan mensajes preguntándome por las tallas de la ropa que muestro en los vídeos”, aseguró.

Los comercios de barrio tienen que reinventarse y Raquel Miralles Mateu lo ha conseguido con el trato cercano de la atención personalizada y el detalle, el conocimiento de lo que quieren los clientes y siguiendo una tradición que abrió hace ya más de 100 años su familia. Eso sí, adaptada a estos nuevos tiempos tecnológicos en los que casi hay que estar 24 horas al día conectados.

Conoce más a Raquel Miralles Mateu a través de la página de facebook de su tienda