Sanidad recopilará deficiencias de los centros de salud de la comarca para iniciar el expediente de rescate de la concesión

La Conselleria de Sanidad comenzará a visitar los centros de salud de la Marina Alta con el fin de conocer su estado y las necesidades que tienen, así como las deficiencias que presentan como un primer paso para acumular argumentos con los que devolver la gestión de la sanidad a lo público y eliminar la concesión a Marina Salud.

Así lo anunció ayer la directora general de Alta Inspección Sanitaria, Isabel González, en el transcurso de una reunión con la Xarxa d'Alcaldes de la Marina Alta, a la que acudieron la mayoría de primeros ediles de la comarca, el nuevo comisionado o vigilante como ellos denominado a este cargo en este rincón informativo, Juan Puig, y la directora territorial de Sanidad, Encarna Llinares.

Estas visitas constituyen un primer paso para iniciar un proceso que se antoja complicado pero que el president de la Generalitat, Ximo Puig, tiene muy claro: y es terminar con el rescate de la concesión a Marina Salud, tal y como desveló hace unos días en el debate de Política General de la Comunitat. Para ello, todo parece apuntar que se hará mediante la vía de rescisión del contrato por incumplimientos del mismo, toda vez que la posibilidad de que el Consell adquiera el paquete accionarial de la aseguradora DKV en Marina Salud se desvanece ante el anuncio del otro socio (Ribera Salud) de adquirirlo.

La directora general indicó que pretenden “valorar las necesidades en infraestructuras” y así el Consell “se podrá hacer una idea de cual es la situación”. González reconoció que “no tienen información” ya que la concesionaria “es la responsable del mantenimiento de las infraestructuras, del personal y de la gestión”. Asimismo reconoció que el Consell “tiene que hacer lo que no se ha hecho en los últimos años” que es “controlar las concesiones” y afirmó que en los últimos años “no ha habido un control serio a estas empresas, pese a que la responsabilidad de la administración es controlar que los pacientes reciben una atención de calidad”.

“Es un modelo creado por el PP, que lo ciudaba para que tuviera éxito”

En este sentido añadió “es un modelo creado por el PP, que estaba muy de acuerdo con él y que lo ciudaba para que tuviera éxito, por ello lo controlaba poco ya que así el éxito está asegurado”. Y remachó “en el momento en que tu lo controlas salen a la luz todas las deficiencias”.

Estas visitas comenzarán en los centros de atención primaria repartidos por toda la comarca, que son -explicó la directora territorial de Sanidad, Encarna Llinares- “la puerta de entrada al sistema sanitario de los vecinos”. Unos vecinos que según afirmó no buscan a la concesionaria cuando ven una deficiencia sino que van a hablar con su alcalde o el concejal de Sanidad. Por este motivo, Llinares expuso que estos cargos “en el momento que detecten cualquier carencia, deben trasladarla al comisionado o a la Conselleria para poner en marcha todos los mecanismos que la legislación nos permite para resolverlo”.

Uno de los aspectos que podría salir a la luz con estas visitas, son las deficiencias que tienen los centros de salud de la comarca. A este respecto la directora general dijo que “la concesión por contrato tiene que realizar una serie de inversiones y tiene que tener los centros de salud adecuados a la normativa”. En concreto, se refirió al Pedreguer y aseguró “si para prestar la atención sanitaria tiene que haber en el centro de salud un baño para personas con movilidad reducida, pues tiene que tenerlo. Si tiene que tener puertas más grandes para que quepa la silla también, y si hay que colocar un ascensor para que se puede acceder a la segunda planta”. Son cuestiones -remarcó- que la concesión tiene que ajustar a la normativa legal.